Canaco-Cuernavaca

Para nadie es un secreto que la actividad económica en Morelos está por los suelos, pero si ha esto Ud. amable lector le aúna que algunas de las agrupaciones empresariales andan por la calle, las cosas si que se ponen color de hormiga. Éste es el caso de la “Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Cuernavaca”, más comúnmente llamada: La Canaco.

Fundada desde antes de la mitad del siglo pasado la Canaco fue referente obligado para cualquier gobierno municipal y por supuesto estatal. Ahí se gestó el movimiento opositor a David Jiménez Gonzales en el año de 1974 siendo Edil de Cuernavaca, que lo tuvo prácticamente en la picota, cuando el presidente de la cámara de comercio le tomó la Plaza de Armas y amenazó con cerrar todo la actividad comercial del centro de Cuernavaca si Jiménez Gonzales no reculaba en su posición con los fenicios, su nombre: Jorge Pérez Bello.

Hombres de valía han pasado por la Canaco. Don Ángel Luis Betanzos, Don Alfonso Martínez, Don Ángel Cházaro Lagos, Don Enrique Pérez Bonin son solo algunos de la vieja guardia que presidieron a la institución. Después llegarían Alfredo Nájera, Virgilio Villalobos, Raúl Pulido, Humberto Corral Arce, José María Román Román y Alejandro Mójica Toledo, entre otros que le dieron señorío y presencia al comercio de la ciudad de la eterna primavera.

Fue bajo la presidencia de Alejandro Mójica que aquellas instalaciones del vetusto Edificio “Bella Vista” se cambiaron a las de la Avenida Morelos, en el sur de la ciudad. La casona que se adquirió con el dinero de todos los comerciantes fue apropiadamente remodelada y desde ese tiempo a la fecha la Canaco cuenta con instalaciones propias que han sido aprovechadas al máximo.

En el siglo pasado el Gobierno de la Ciudad de Cuernavaca y desde luego el del estado, entendían que una Cámara de Comercio de Cuernavaca fuerte daba un mensaje de estabilidad y de poderío económico a nuestros competidores en otros estados de la república. De ahí que siempre se tuviera el cuidado de mantenerla viva y participante, no pasaba un gobernante que no tuviera siempre el cuidado de atender a éste sector de nuestra población. Lauro Ortega Martínez lo entendió muy bien y apoyó a la Canaco en todas sus actividades, después llegaría Antonio Riva Palacio y no cejaría en atenciones hacía el sector comercio de la capital del estado.

El rompimiento viene con Carillo Olea. La poca o nula atención que sus secretarios de desarrollo económico brindaron a “Canaco-Cuernavaca” dio al traste con las relaciones interinstitucionales, llegando a demandar los comerciantes organizados de Cuernavaca, en aquellas tres marchas del silencio, la salida del gobernador Carillo Olea, propiciando con ello la salida del PRI del gobierno de la ciudad de Cuernavaca y posteriormente del gobierno del estado de Morelos.

“Canaco-Cuernavaca” se encuentra casi en etapa terminal, los que ahí hemos participado sabemos bien que la atención que durante los últimos doce años se le brindó desde el gobierno estatal y municipal fue casi nula. El apoyo que desde el poder se ha brindado a los grandes consorcios comerciales, ha desplazado al pequeño y mediano comerciante. Si a eso le agregamos que no existe más la obligatoriedad de participar en una cámara empresarial, eso redunda en que de alrededor de doce mil comerciantes registrados en padrón de Canaco en los años 80s., ahora solo se hable de menos de seiscientos. La situación económica que se está viviendo en el seno de la “Cámara de Comercio” es de extrema urgencia. Pero ahí no termina todo, al paso del tiempo los comerciantes organizados de Cuernavaca han tenido que hacer frente a cuando menos cuatro juicios laborales que los tienen con un pasivo legal contingente enorme. Si no se pone solución a estos asuntos legales laborales, seguro será que “Canaco-Cuernavaca” tenga que entregar el único patrimonio propio con que cuenta en éste momento: El edificio de Av. Morelos 609.

Sin embargo nuestro gobierno estatal sigue más preocupado por promover el turismo de Morelos en España, que en sentarse de inmediato con los comerciantes y buscar una solución al enorme problema que los aqueja.

No cabe duda que tendrá que ser Manuel Martínez Garrigos el que tenga que ponerles-una vez más-el ejemplo de lo que se tiene que hacer y busque una reunión de urgencia con el consejo directivo de Canaco.

Nada más imagínese la nota en la prensa nacional: ¡Cuernavaca se que queda sin Cámara de Comercio! , solo eso nos falta.

JABONAZO
Señores Secretarios de Desarrollo Económico y de Turismo. ¡Hagan algo ya!

Estercolero

Ni duda cabe que aquello del “Gobierno del Cambio” fue toda una pifia. Todo hace pensar que desde la llegada del PAN al gobierno federal en el año 2000, el narcotráfico, especialmente todo lo relacionado con el Cártel de Sinaloa, tuvo un auge como nunca. Desde la espectacular “huida” otros le decimos “salida” del “Chapo” Guzmán aquel 19 de Enero del 2001 del penal de Puente Grande, en Jalisco-en las postrimerías del sexenio de Fox-éste poderoso Capo es quien manda dentro de las estructuras del crimen organizado en nuestro país, llegando a la vergüenza nacional de que sea considerado como uno de los hombres más influyentes y ricos del orbe por la prestigiada revista internacional “Forbes”.

No me queda claro si como señala la diputada Hortensia Figueroa (PRD), el narcotráfico y sus capos llegaron a Morelos desde el gobierno del General Carillo Olea y lo heredó Estrada Cajigal o si como es del todo sabido éste lucrativo negocio asentó sus reales en la tierra de Zapata desde el sexenio de Antonio Riva Palacio y tuvo en Rafael Aguilar Guajardo a su más alto exponente como “Capo di tutti capi” del Cártel de Juárez y con una fuertísima influencia dentro de algunas de las ramas de la economía de Cuernavaca, concretamente en la del turismo. Con el establecimiento en Cuernavaca de éste poderoso barón de la droga, la llegada de los “Nuevos Ricos” fue inminente. Casas y terrenos, así como antros, fueron los preferidos de Aguilar Guajardo, para ello siempre contó con el apoyo de “dóciles” Notarios Públicos Tlahuicas que invariablemente aprobaron las compraventas que se hacían en efectivo y por varias centenas de miles de dólares.

Aguilar Guajardo es acribillado por sicarios del Cártel del Golfo bajo las órdenes de los hermanos García Abrego en Can-Cun en abril de 1993. Es así que “la plaza” la hereda quien a la muerte del “Rafa” se entrona como el nuevo “Jefe de jefes” del Cártel de Juárez: Amado Carillo Fuentes “El señor de los cielos”.

El estercolero siguió y Estrada Cajigal estuvo a punto de ser “liquidado” como gobernador, las relaciones peligrosas que sostuvo con uno de los lugartenientes del Cártel de Juárez y sus excesos lograron que la DEA le pusiera el dedo y fuera señalado por varios testigos protegidos como el protector de Juan José Esparragoza alias “El azul”, del cual se afirma que es el lado fino de “la empresa”.

Para muestra solo un botón. Marco Enrique Yepez Uribe (a) El Jarocho, declara ante la “Unidad Especializada en Delincuencia Organizada” en fecha 25 de Enero del 2003 lo siguiente, con lujo de detalles relata los tratos que sostuvo con el crimen organizado en Morelos y como de estos se desprendía la relación entre Sergio Estrada y Juan José Esparrgoza. Desde la foja 20 hasta la 38 de la solicitud que hace ésta unidad investigadora de la PGR al juzgado de distrito en turno, de fecha 28 de mayo del 2003, solicitando el cateo de seis inmuebles en Morelos, se observa con claridad el “modus operandi” y la protección que desde el gobierno del estado se brindaba al trasiego y venta de droga.

En la foja 25, Yepez Uribe, relata la llamada telefónica que habría recibido Estrada Cajigal en su oficina, como sigue: “SI, BUENAS NOCHES SEÑOR, SI SEÑOR, LOS ACABO DE SACAR (A TENORIO Y SALINAS NOVION) DE LA HABITACIÓN, NO LES HE DICHO TODAVÍA, ME DA PENA DECIRLES, SI SEÑOR, SI SEÑOR, AQUÍ ESTÁ A MI IZQUIERDA Y A MI DERECHA, AHORITA LES DIGO SEÑOR, colgando el auricular. Y fue cuando se dirigió a mi para decirme QUE SI LA CUESTIÓN ESTABA MUY DURA, QUE SI DE VERDAD CORRÍA PELIGRO EMINENTE EL SEÑOR SALINAS NOVION, POR LO QUE NO HABÍA OTRA QUE EJECUTARLO, refiriéndose a BENJAMIN”.

El resultado Ud. amable lector ya lo sabe, seis toneladas de cocaína bajaron a Morelos, Benjamín Gómez alias “El Chino” fue ejecutado, Agustín Montiel fue sentenciado, el comandante Luis Alain Pano Vega fue acribillado, Raúl Cortés (a) El Mico sentenciado y de las siete propiedades que fueron cateadas por ordenes del Juez Primero de Distrito en Morelos, motivo de estas declaraciones ministeriales, cuando menos seis resultaron positivas como casas y ranchos en donde se llevaban a cabo actividades de delincuencia organizada. Morelos se ha convertido en un estercolero, gobiernos vienen y van y las relaciones entre los capos y nuestras autoridades son tan evidentes que solo un ciego no las observa.

Si bien es cierto puede proceder el juicio político en contra de Marco Adame, también es cierto que primero se tiene que ir a la cárcel Estrada Cajigal y su segundo de abordo, si ese que se apellida como éste escribidor.

JABONAZO
El costo de un juicio político al gobernador puede ser altísimo. Morelos no lo soportaría. Cuidado, mucho cuidado.




2010

Éste año se cumplen cien y doscientos años de los inicios de las dos gestas bélicas más importantes de México como nación. El año de 1810 marca la iniciación de la guerra de independencia con la Península Ibérica o España, que nos tuvo sojuzgados por más de trescientos años. El poder que ejercían los Iberos en la colonia hasta antes de la firma de los “Tratados de Córdoba” el 24 de Agosto de 1821 y que reconocía finalmente la independencia de la Nueva España era monstruosa, no existía ninguna actividad social, económica y desde luego política en que no estuviera presente esa clase privilegiada que tanto se benefició de ello y que al cabo del tiempo no dejaba de inmiscuirse en asuntos propios de la incipiente nación llamada México, de ahí la llegada del primer Emperador Mexicano en 1822: Don Agustín de Iturbide o Agustín I. de México, como se autoproclamó, hasta abdicar en 1823 después de ser derrotado por la oposición liberal que ansiaba una república y exiliado a Europa hasta 1824, de donde a su regreso fue pasado por las armas por traición a la patria.
Hasta 1854 los vaivenes sociales de México fueron muchos, Antonio López de Santa Anna había sido presidente de la nación durante diez ocasiones y en sus cuestionados mandatos había entregado medio país a los norteamericanos. La “Alta California” y “Tejas”, que no Texas como se le conoce ahora, formaban parte integral de nuestro territorio y fueron “convenientemente” negociados con nuestros abusivos vecinos del norte. El “Plan de Ayutla” proclamado por Florencio Villareal, Juan N. Álvarez e Ignacio Comonfort dio al traste con los deseos reeleccionistas de Santa Anna, el cual en 1855 partió hacía Colombia y cuenta la historia que estuvo a punto de ser parte de la corte de Maximiliano, pero el joven archiduque lo desdeño alegando la mala fama del inicuo ex presidente.
El primero de Octubre de 1855 Don Juan N. Álvarez llega a Cuernavaca, y desde aquí proclama la Nueva República, en los escasos treinta y ocho días de su mandato logra colocar entre otros magníficos personajes, a Ignacio Comonfort, Guillermo Prieto, Melchor Ocampo y Benito Juárez García en su gobierno. Dos disposiciones fundamentales para la república se tomaron en ese momento, la denominada “Ley Juárez” que proclamaba la convocatoria al congreso que elaboraría la Constitución de 1857, y la abolición del fuero militar y eclesiástico. Cabe mencionar, que el gobierno que encabezó efímeramente Don Juan N. Álvarez, tuvo su sitio oficial, en lo que vergonzosamente es el día de hoy un comercio en donde se venden calzones y que durante años albergó con dignidad al antiguo “Hotel Palacio”. Una falta más para el INAH y la Secretaría de Turismo.
Para 1859 y 1860 se proclaman las “Leyes de Reforma”. Benito Juárez completa a la Constitución de 1857 con mandatos que ponían en orden a la Iglesia Católica en sus propiedades y establecía la libertad de cultos, que era quitarle de tajo el monopolio absurdo de la creencia religiosa a la iglesia católica y rendirle pleitesía al Papa romano y sus obispos. De Mayo de 1864 a Junio de 1867 Maximiliano de Habsburgo rige a México-Cuernavaca fue punto toral en esta época-el Segundo Imperio Mexicano termina abruptamente, cuando Benito Juárez García lo pasa por las armas en el Cerro de las Campanas en Querétaro, dando por terminada una época aciaga para la república.
Después de mucho intentarlo, Porfirio Díaz Mori llega a ser Presidente de México el 5 de Mayo de 1877, interrumpido solo en 1880 y 1884, la dictadura de Díaz fue en momentos de crecimiento y en momentos de profunda represión. Auxiliado en las labores de gobierno por los “científicos”, Don Porfirio dio auge a los ferrocarriles y a la inversión extranjera, poniendo en manos de solo unos cuantos el poder económico de México. La minería fue unos de los rubros consentidos de Díaz, llegando a derogar las “alcabalas”, que no eran otra cosa, que impuestos regionales que los estados de la república cobraban a industriales y comerciantes, haciendo con ello el transito más lento de alimentos y mercancías en la República Mexicana.
Las artes y la cultura tuvo finalmente un apogeo importante en el país, Don Porfirio entendió que una nación que carecía de identidad, difícilmente podría saber en donde estaba cimentada.
El problema de Díaz fue haberse olvidado de los pobres, el oaxaqueño se olvidó de sus raíces liberales y se dedicó a beneficiar a una clase económica rapaz y corrupta, que día con día ambicionaba más y más del pastel económico de su época. Así nacen las inquietudes revolucionarias de Flores Magón, Serdán, Madero, Zapata y Villa entre otros en 1910, la inequidad entre los que más tenían y aquellos que no poseían nada fue atroz, llegando a la vergüenza de que solo ochocientas familias controlaban la actividad económica de México. Muy semejante a lo que sucede actualmente en éste 2010.
¿Qué tenemos que celebrar? Seguimos con un gobierno que solo beneficia a los ricos, actualmente son solo cuatrocientas familias las que controlan la economía del país. Nuevos bandoleros como Villa en su época-ahora se llaman narcos-nos tienen en la zozobra diaria y los políticos-y sus partidos-solo ven para sus intereses, bueno, hasta la iglesia católica a perdido su rumbo.
¿Quién representa al pueblo? nadie. No hay nada que celebrar.
JABONAZO
¿Quién pagará por las muertes de inocentes en Altitude? Sr. Gobernador, Ud. fue elegido por Morelenses. ¿Qué espera?








Del Turismo y sus Mentiras

Escandalosos y con un daño colateral enorme fueron sin duda sendos operativos que la Marina-Armada de México realizó en los últimos días del año pasado en la entidad. Fuimos-como cuando el mecánico Estrada Cajigal, ahora millonario, nos desgobernó-la nota obligada a nivel nacional e internacional, no había medio masivo de comunicación electrónica que no diera cuenta de la cruenta batalla que se escenificó primero en “Los Limoneros” en Ahuatepec, otrora bello rancho de Don Tintino Legorreta y en las ya de por si ignominiosas “Torres Altitude” en al antiguo barrio del “Pilancón” en Cuernavaca.
Así las cosas, era de esperarse que nuestra pírrica actividad turística de fin de año se viera seriamente mermada. ¿A quien le gustaría ir de vacaciones a un lugar en donde a mañana, tarde y noche se dice de él que existe “toque de alerta” y que las tanquetas del ejercito andan patrullando la ciudad de Cuernavaca y sus zonas aledañas? con las consabidas imágenes de los marinos dando cuenta de la persona de quien fue sin duda el jefe del narco en Morelos y jefe además de varios políticos en éste vilipendiado estado de Morelos: Arturo Beltrán Leyva.
En ésta parafernalia de dimes y diretes, además de las consabidas declaraciones de algunos de nuestros excelsos políticos criticando-ahora si-al gobierno de Adame, vino la posición irresponsable del titular de el sector turismo en Morelos, el cual al mejor estilo del viejo y arcaico sistema, señaló a los cuatro vientos, que aquellos que sostenían que se habían cancelado algo así como mil doscientas habitaciones para el fin de año estaban equivocados, más aún, salió con la veterana y reprobable perorata de afirmar que Morelos mantenía una ocupación habitacional producto de los miles de visitantes que llegaron a la región, y la misma de alrededor del ochenta por ciento de la capacidad instalada por los prestadores de éste tipo de servicio, es decir los hoteleros.
No tardó desde luego la respuesta de quienes estaban viviendo en carne propia los resultados de la enésima presencia del narco en Morelos. Los hoteleros organizados, en voz de su presidente, le respondieron al notario público con licencia, hora metido de secretario de turismo y seguramente en breve como precandidato al gobierno de la ciudad de Cuernavaca y a lo mejor hasta en precandidato a gobernador por el PAN-la caballa en acción nacional no está flaca, está al borde la inanición-que sus cifras no checaban en lo más mínimo.
Las cantidades que ellos tenían en la mano hablaban de una triste ocupación de no más del treinta y cinco por ciento de la capacidad instalada. Sin tocar abiertamente aquellas cancelaciones de última hora los prestadores de servicio turístico dejaban claro que entre los “alegres montos” que manejaba el sector turismo estatal y las de ellos había una abismal diferencia. La realidad les daría la razón.
Para nadie fue una sorpresa el advertir una “Ciudad de la Eterna Primavera” vacía, los lugares en donde se apreció movimiento de personas éstas navidades fue en “Las Galerías”, lugar éste, donde desde hace unos años la gente de Cuernavaca-que no los visitantes de fuera-son asiduos compradores en la novedosas tiendas departamentales como Sanborn´s o Liverpool y sus restaurantes y cafeterías lugares obligados de la gente menuda, que los han hecho centro de reunión forzada de aquellos que se sienten miembros de la sociedad Tlahuica.
Pero el turismo estatal no conforme con ello emitió un nuevo reporte de la actividad turística de éste fin de año. Con números sustentados en una de las tantas empresas “patito” que se suelen contratar desde el gobierno del estado denominada “REDES Turismo”, dedicada a la investigación para el desarrollo, especializada en diseñar estrategias de negocios, mercado, comercialización y desarrollo de proyectos turísticos, el número de visitantes se incrementó con comparación a las cifras obtenidas hace un año. Con valores recabados entre el 19 de Diciembre del 2009 y el 3 de Enero del 2010-el informe lo dieron a conocer el día primero de Enero del 2010-ésta empresa afirmó que las personas que pernoctaron en Morelos en ésta época fue de ciento treinta y un mil quinientas dieciocho personas y afirmando que la ocupación hotelera fue de un setenta porciento de la capacidad instalada, muy cercana a la media nacional.
Los números siguen sin checar, sobre todo si partimos de la base que Morelos cuenta con una baja capacidad en habitaciones de hotel. Siguiendo las cifras de ésta empresa en la cual plácidamente se recarga el sector turismo oficial, nuestra entidad debería de contar con algo así como tres mil habitaciones para albergar a un promedio de nueve mil personas diarias y eso desde luego ésta muy fuera de la realidad. Si a eso le agregamos que según éste informe llegaron en total quinientos cincuenta mil visitantes en ese periodo la cosa se pone más dudosa, ya que entonces estaríamos frente a casi trescientas mil personas que residieron en Morelos en casas habitación y son una franja a la cual resulta imposible de medir, al menos que se levante un censo especial y ese no fue el caso.
En fin, el turismo y sus mentiras. Que difícil resulta encontrar en Morelos funcionarios públicos de altura.
Dice Joan Manuel Serrat: “Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”
JABONAZO
Feliz 2010. Que éste año nos traiga a todos los Morelenses mejores servidores públicos. Nos urge.