No recuerdo quien haya compuesto aquel refrán que dice: “Disímiles como el agua y el aceite”, pero en el caso de algunos políticos mexicanos ésta máxima no se aplica. Quien iba a pensar que Marcelo Ebrard andaría de zalamero con Felipe Calderón, al reconocer públicamente-por cierto aquí en Cuernavaca- el valor del Presidente de la República en contra del crimen organizado y qué éste se dejaría “seducir” con la idea de que su partido, el de Acción Nacional, pueda nombrar a un miembro de la sociedad civil-o algún otro personaje no necesariamente del PAN-como candidato a la Presidencia de la República en el 2012 y pudiera tener en mente a Marcelo.
La simbiosis entre éstos dos simbiontes se está dando y no dudemos que en el mediano plazo y dada la complacencia que desde el PRD colaboracionista de Jesús Ortega, el PAN empiece a ver con “buenos ojos” al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, virtud de la escases de cuadros al interior de ese partido con miras a la elección del 2012. De acuerdo a la última encuesta publicada por el diario “Reforma” éste domingo pasado, los azules no tendrían a nadie con quien pelear ésta posición importantísima, el más cercano al PRI sería Santiago Creel, con apenas un 20% de las intenciones del voto, muy por debajo de Andrés Manuel López Obrador, que sin el PRD, se lleva de calle a Ebrard y a Creel y empieza a cerrar la diferencia con Enrique Peña Nieto, como viene sosteniendo, María de las Heras, desde hace varias semanas. Asunto éste que resulta harto preocupante, sobre todo para aquel que desde el puesto de Senador de la República por el PRD en Morelos-ganado por la popularidad de “El Peje”-ha venido repudiando al movimiento nacional de López Obrador y sigue entregado en los brazos de Marco A. Adame. buscando afanosamente con ello, una alianza para Morelos, similar al entuerto que tratan de formar para el Estado de México en el 2011.
Que difícil debe de ser para Marcelo Ebrard el jugarle las contras a AMLO. Me da la impresión de que el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, está siendo mal aconsejado por Manuel Camacho Solís, del cual es sabido su proclividad a las coaliciones raras, no se olvide que éste personaje fue en su momento político más importante, cercanísimo colaborador de Carlos Salinas de Gortari, aunque mucho se ha dicho que con la designación del malogrado Luis Donaldo Colosio, en Noviembre de 1993, la relación entre estos dos políticos devino en contrariedad mutua, sin embargo: “Donde hubo fuego, cenizas quedan”
Hace unos días, Andrés Manuel López Obrador declaró públicamente, que la candidatura de Ebrard a la Presidencia de la República, estaba siendo impulsada por aquella pléyade de sinvergüenzas, que él define como “La Mafia”. Está claro, que bajo la óptica del ex candidato presidencial del PRD, Marcelo Ebrard, estaría sosteniendo pláticas con el nuevo titular del PAN, Gustavo Madero, con la finalidad de abrevar a una nueva alianza PAN-PRD en el 2012, liga que estaría planteando la posibilidad de Marcelo como su candidato presidencial. En política la forma es fondo. ¿De cuando acá, Marcelo resulta en defensor de Felipe Calderón? “A otros perros con ese hueso”, el Jefe de Gobierno ya sintió el peso del movimiento de AMLO y no quiere quedarse fuera de la posibilidad-por cierto muy remota-de gobernar el país, aunque sea de aliado del PAN.
Si la alianza de Marcelo Ebrard, PRD y PAN se diera en los hechos, entonces estaríamos ante la posibilidad real, de que Carlos Salinas de Gortarí poseyera dos candidatos al poder ejecutivo en el 2012, por un lado el Gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, y por el otro, aunque soterrado y clandestino, a Marcelo Ebrard Casaubon. ¡Cosas veredes, el Cid, cosas veredes!
“Simbiosis”, asociación entre el PAN de Calderón y el PRD renegado de “Los Chuchos”. No se olvide que dentro del apetitoso pastel que resulta ser la elección en el 2012, también cambia el puesto de Jefe de Gobierno del Distrito Federal, posición que tanto panistas, como la actual diputada federal, Gabriela Cuevas, y perredistas como el propio Jesús Ortega, le suspiran con ansia. Así que a lo mejor en esta locura de las alianzas “a huevo”, la candidatura a la presidencia sería para el PRD y la de la Ciudad de México sería para el PAN.
¿Qué opinaría de esto Dolores Padierna?
JABONAZO
Los días de Gerardo Casamata están contados en la ASF. Pronto terminará uno de los episodios más negros del entreguismo y la componenda a hurtadillas. Que así sea.
La simbiosis entre éstos dos simbiontes se está dando y no dudemos que en el mediano plazo y dada la complacencia que desde el PRD colaboracionista de Jesús Ortega, el PAN empiece a ver con “buenos ojos” al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, virtud de la escases de cuadros al interior de ese partido con miras a la elección del 2012. De acuerdo a la última encuesta publicada por el diario “Reforma” éste domingo pasado, los azules no tendrían a nadie con quien pelear ésta posición importantísima, el más cercano al PRI sería Santiago Creel, con apenas un 20% de las intenciones del voto, muy por debajo de Andrés Manuel López Obrador, que sin el PRD, se lleva de calle a Ebrard y a Creel y empieza a cerrar la diferencia con Enrique Peña Nieto, como viene sosteniendo, María de las Heras, desde hace varias semanas. Asunto éste que resulta harto preocupante, sobre todo para aquel que desde el puesto de Senador de la República por el PRD en Morelos-ganado por la popularidad de “El Peje”-ha venido repudiando al movimiento nacional de López Obrador y sigue entregado en los brazos de Marco A. Adame. buscando afanosamente con ello, una alianza para Morelos, similar al entuerto que tratan de formar para el Estado de México en el 2011.
Que difícil debe de ser para Marcelo Ebrard el jugarle las contras a AMLO. Me da la impresión de que el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, está siendo mal aconsejado por Manuel Camacho Solís, del cual es sabido su proclividad a las coaliciones raras, no se olvide que éste personaje fue en su momento político más importante, cercanísimo colaborador de Carlos Salinas de Gortari, aunque mucho se ha dicho que con la designación del malogrado Luis Donaldo Colosio, en Noviembre de 1993, la relación entre estos dos políticos devino en contrariedad mutua, sin embargo: “Donde hubo fuego, cenizas quedan”
Hace unos días, Andrés Manuel López Obrador declaró públicamente, que la candidatura de Ebrard a la Presidencia de la República, estaba siendo impulsada por aquella pléyade de sinvergüenzas, que él define como “La Mafia”. Está claro, que bajo la óptica del ex candidato presidencial del PRD, Marcelo Ebrard, estaría sosteniendo pláticas con el nuevo titular del PAN, Gustavo Madero, con la finalidad de abrevar a una nueva alianza PAN-PRD en el 2012, liga que estaría planteando la posibilidad de Marcelo como su candidato presidencial. En política la forma es fondo. ¿De cuando acá, Marcelo resulta en defensor de Felipe Calderón? “A otros perros con ese hueso”, el Jefe de Gobierno ya sintió el peso del movimiento de AMLO y no quiere quedarse fuera de la posibilidad-por cierto muy remota-de gobernar el país, aunque sea de aliado del PAN.
Si la alianza de Marcelo Ebrard, PRD y PAN se diera en los hechos, entonces estaríamos ante la posibilidad real, de que Carlos Salinas de Gortarí poseyera dos candidatos al poder ejecutivo en el 2012, por un lado el Gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, y por el otro, aunque soterrado y clandestino, a Marcelo Ebrard Casaubon. ¡Cosas veredes, el Cid, cosas veredes!
“Simbiosis”, asociación entre el PAN de Calderón y el PRD renegado de “Los Chuchos”. No se olvide que dentro del apetitoso pastel que resulta ser la elección en el 2012, también cambia el puesto de Jefe de Gobierno del Distrito Federal, posición que tanto panistas, como la actual diputada federal, Gabriela Cuevas, y perredistas como el propio Jesús Ortega, le suspiran con ansia. Así que a lo mejor en esta locura de las alianzas “a huevo”, la candidatura a la presidencia sería para el PRD y la de la Ciudad de México sería para el PAN.
¿Qué opinaría de esto Dolores Padierna?
JABONAZO
Los días de Gerardo Casamata están contados en la ASF. Pronto terminará uno de los episodios más negros del entreguismo y la componenda a hurtadillas. Que así sea.
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