Cultura & Co.

Ni duda cabe que el maestro Manzanero es un baluarte de la composición mexicana. Aquellos que tuvieron el privilegio de escucharlo éste pasado nueve de mayo en la Plaza de Armas de Cuernavaca así lo manifiestan. Canciones como “Esta tarde vi llover” y “Contigo aprendí” debieron de ser de las más aplaudidas por el respetable que desde horas antes hizo antesala para poder acceder a un lugar de buena visión y desde allí tararear a coro con el bajito del Mayab.

Qué venga Manzanero a cantarles a las madres de Cuernavaca no está del nada malo, lo que está pésimo es que la cultura en Morelos, desde que llegó el gobierno de la Nueva Visión, se dedique a la presentación consuetudinaria de cantantes en la plazas públicas del Estado, convirtiendo a la secretaría de la cultura, en manos de la “turista” Cristina Faesler, en una que solo se dedica al entretenimiento de masas, dejando de lado el fomento a esa parte de la formación del ser humano tan importante llamada: “Cultura”.

El acceso a la cultura es una garantía constitucional, el artículo cuarto de la constitución federal señala: “Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura y al disfrute de los bienes y servicios que presta el Estado en la materia, así como el ejercicio de sus derechos culturales. El Estado promoverá los medios para la difusión y desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones con pleno respeto a la libertad creativa. La ley establecerá los mecanismos para el acceso y participación a cualquier manifestación cultural”. 

Así qué, el acceso, manifestación y expresión de la cultura no está al capricho de la autoridades encargadas de ello, la carta magna es clara cuando afirma qué el Estado promoverá los medios para la difusión y desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones con pleno respeto a la libertad creativa.

¿A todos les gusta ver conciertos de cantantes en las plazas públicas de Morelos, como el de Lila Downs, Bebé, Fernando de la Mora, Omara Portuondo, Armando Manzanero y Placido Domingo en Tequesquitengo éste octubre? ¿Es eso es diversidad cultural o solo es parte de una expresión de ello más cercana al entretenimiento? ¿Quién o quienes conformaron el proyecto de cultural de Morelos para el sexenio 2012-2018? ¿Conocen Morelos? ¿Saben de la diversidad de expresiones culturales en la entidad? lamento decirles que no, el Plan Estatal de Desarrollo debió de consultar a las distintas expresiones de la cultura y a menos de que éste que escribe esté equivocado, los foros para el proyecto cultural fueron pocos o de plano no hubo, de allí que se perciba que la cultura en Morelos se deba de manejar como se hace en el Distrito Federal. Craso error.

Hace unos días se expresaron varios y reconocidos artistas de Morelos, la molestia es que no perciben en el gobierno estatal una estrategia cultural a mediano plazo que los incluya. Eduardo Borbolla, hijo de Don Jorge Borbolla, iniciador de la industria de la cerámica en Morelos y mimo de los buenos, puso el dedo en la llaga. Borbolla afirma que la ahora secretaría de la cultura solo se dedica a la presentación de músicos y cantantes en las plazas de Cuernavaca y Jiutepec, dejando de lado a los artistas plásticos y de teatro entre otros más, no obstante qué el impulso que el H. Congreso le dio económicamente fue descomunal. De cuarenta millones por año, ahora la secretaría de la cultura cuenta con un presupuesto anual de cuatrocientos millones de pesos. Dinero no falta.

La secretaría de la cultura debe de ser revisada a la brevedad por la Auditoría Superior de Fiscalización. Los dineros que ahí se están manejando son muchos y pudiera ser que algunos vivales estuvieran haciendo su agosto en la presentación de cantantes. Éste escribidor incursionó sin éxito en la presentación de grupos musicales y sabe bien como “masca la iguana” en la contratación de los mismos.

Evasión de impuestos y simulación de contratación son solo algunas de las linduras que pudieran estar en torno de las presentaciones musicales, sin dejar de mencionar que los escenarios, luces, camerinos ambulantes y caprichos de los artistas, forman parte de cada negociación individual y ascienden a cantidades muy respetables.

¿No sería más sano apoyar a los escultores y pintores morelenses? ¿O crear una escuela de cerámica artística en la colonia tres de mayo?, qué tal propiciar un encuentro nacional de historia de la revolución mexicana en Chinameca o la implementación de la presentación de títeres en las escuelas públicas, expresión artística de la que tanto conoce Gabriela Vizcarra.

En Morelos sobra talento cultural, lo que se requiere es una política seria en favor de ella a la brevedad.

JABONAZO

Seis millones y medio de pesos se despachó el gobernador en la remodelación de las oficinas que le dan servicio a su área porque había cucarachas. ¿Frivolidad, necesidad o tranza, Ud. qué opina?