Ayer se dio el primer
informe de gobierno del gobernador de Morelos, si, han sido 365 días de ésta
administración en los cuales los claroscuros han estado a la orden del día. Los
yerros del ejecutivo estatal han estado por encima de algunos aciertos que por
pírricos dejaron de ser importantes para la población.
La tónica del gobierno
de la “Nueva Visión” ha sido el estar
dentro o alrededor del escándalo estatal y nacional. Ello ha redundado en la
desesperanza, hartazgo y desesperación de la población, al vislumbrar que si
así fue el primer año de gobierno, solo queda imaginarnos como serían los cinco
que restan, eso si el gobernador termina su sexenio, asunto que se antoja por
demás cuesta arriba.
El primer escándalo del
año, si es que no me equivoco, fue el suntuoso gasto que el gobernador destinó-sin mediar para ello licitación alguna-para
la “remodelación” de toda el área de
su staff, incluyendo desde luego las oficinas del de Tabasco, a las cuales se
les blindó con vidrios de muchos milímetros de espesor los cuales habrían costado al erario público
la no menor suma de ocho millones de pesos. Pero ahí no quedó la cosa, el
propio secretario de gobierno justificaba el enorme gasto de la adecuación de
las oficinas del gobernador al calificarlas de que: “Estaba lleno de cucarachas y no se podía trabajar así” y así se
gastaban alrededor de catorce millones de pesos en banalidades puras.
Al cabo de los días nos
enteraríamos de más gastos onerosos a cargo del erario público. Se dio a
conocer una nueva remodelación, ahora en el inmueble de la Colonia Vista
Hermosa, en la Calle de Jantetelco, mejor conocida como “Casa Morelos”. Ahí la justificación la dio una vez más el
secretario de gobierno al volver a mencionar una serie de bichos que estarían por
ahí, haciendo imposible la habitación de la misma. La suma que se gastó el
gobernador Ramírez fue de algo más de dieciséis millones de pesos, eso sin
contar las novedosas obras de arte-el
gobernador es aficionado al arte moderno-que
serían compradas en exclusivas galerías de arte de la zona de Polanco del D.F.
y que la autoría sería de reconocidos artistas plásticos nada
baratos en su obra.
Apasionado de las “Revistas del Corazón”, el gobernador de
Morelos no ha dejado ir a fiesta importante alguna, sobre todo en el Distrito
Federal. Todos los días de éste año, el enorme presupuesto que se le destinó al
rubro de la comunicación social-cuatrocientos
millones de pesos-ha servido para enaltecer el ego del gobernante, el cual
no deja de salir en los periódicos estatales y en uno o dos nacionales, en
estos últimos mediando por ello contratos millonarios de prestación de
servicios al gobierno de Morelos. Y de los estatales, la cadena Bracamontes
cobra algo así como nueve millones de pesos mensuales por sus servicios, suma
que al terminar el sexenio llegaría a seiscientos cuarenta y ocho millones de
pesos. ¿Cómo la ven?
Después nos enteramos
del dispendio en la contratación de artistas de renombre para entretener a la
población, vendiéndonos que ello era para “fomentar
la cultura” en el pueblo. Explicación que no permeó en nada entre la gente,
sobre todo porque la secretaria de la cultura, Cristina Faesler-la turista-no toma en cuenta a los
artistas locales y en voz de Eduardo Borbolla vimos como estos se quejaban de
la discriminación al arte morelense y su malestar en la presentación
sistemática de cantantes en plazas públicas.
Y ni que decir del
equipo de guardias del gobernador y su familia. Sería el propio gobernador el
que aceptara que solo él cuenta con veinte elementos a su disposición y serían
sesenta en total los que cuidan a toda su familia, incluyendo desde luego
aquellos que viven en la capital del país.
Los cinco millones de
pesos pagados al ex juez inhabilitado Baltasar Garzón por una ley de víctimas
que supuestamente se consensó con el pueblo a través de varios foros, es uno de
los gastos que el gobernante tendrá obligadamente que informar, así como el
dispendio al comprar nuevas camionetas blindadas Suburban súper cargadas, con
valor superior al millón y de pesos por unidad.
No terminaría de
enumerar el dispendioso gasto de éste primer año de gobierno en contraste con su
falta de resultados. Me faltó mencionar el concierto de Placido Domingo, el
cual nos lo vendió como apoyo para alguna dependencia estatal si es que hay
utilidades del mismo. Al final del camino veremos que las cifras que arroje la
presentación del tenor español en Tequesquitengo serán mediocres, por no decir
pírricas. Quién se llevará las ganancias, además del tenor internacional, serán
sin duda la o las compañías que bridan el apoyo logístico y dentro de una de
ellas se habla de familiares muy cercanos al gobernador Ramírez.
Échele cuentas amable
lector, aquí solo hemos hablado de cerca doscientos millones de pesos en
gastos, sin contar desde luego con el apoyo
de cinco millones de pesos más a “Las Mañanitas” por “Futuros eventos que hagan en ese
lugar”.
Además de centenas de
homicidios, decenas de secuestros y miles de robos en el primer año.
JABONAZO
Una “turista” más en el gobierno de la “Nueva Visión”. María Victoria Garza
Vara, pasó de la Secretaría de la Cultura del DF. a asesora del DIF-Morelos y
ahora es Directora Jurídica de la Secretaría de la Cultura de Morelos. ¡Vivan
los fuereños en la Nueva Visión!
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