Tal vez México sea el
único país democrático que habilita a sus contralores o a su contraloría, es
decir al órgano de control interno que lo vigila, por la vía de la designación
directa de quienes en teoría deben de ser auditados y controlados. En buen
cristiano, en Morelos fue el propio gobernador del Estado el que nombró al
prestigiado Contador Público, José Iñesta Mommany como Secretario de la Contraloría, de ahí a
que el gobernante actual deje que el
Contralor cumpla con su trabajo es otra cosa, es más, se empieza a saber que existen
notables discrepancias entre el Contralor General y la gente que se encuentra
bajo la cobija política de la primera dama del Estado. Sobre todo en el rubro
de los pagos por honorarios, en los cuales estarían dados de alta familiares
cercanos a quienes ahora laboran dentro del gobierno del Estado.
En el caso de la
supervisión directa del Congreso del Estado a la totalidad del Poder Ejecutivo
de Morelos, la misma se encuentra en manos del Auditor Superior de
Fiscalización por ministerio de ley. La Auditoría Superior de Fiscalización es
un ente dependiente del Poder Legislativo, su titular, al igual que los
directores de área, son designados por unanimidad de los votos de los diputados
en funciones. El espíritu en la conformación de ésta instancia es la de
supervisar a todos por igual, de ahí que la ASF sea un enorme nido de grillos
en donde todos los partidos políticos, pero principalmente el que se encuentra
gobernando al Estado de Morelos, busque con urgencia que el titular y sus
directores sean afines a su causa.
El Auditor Superior
revisa años cumplidos, es decir, solo puede revisar el año que antecede, de ahí
que a partir de enero del año que está por llegar, Luis Manuel Gonzales
revisará el primer año de gobierno de Graco Ramírez. Uno identificado con el
PRI, del cual fue su Presidente Estatal, y el otro ligado con el partido que lo
llevó al poder, es decir el PRD. ¿Ud. cree que al gobernador le gusta que un
personaje priista, que además se ha confrontado con él abiertamente le revise
los cajones? La respuesta lógica es: NO
Ya empezó otra vez el
golpeteo en contra de “El Chueco” González. Desde el Congreso del Estado las
huestes identificadas con el gobernador están haciendo la chamba de desacreditar
al Auditor Incomodo. Esos diputados saben bien que su labor en contra del
titular de la ASF les puede redundar en el beneplácito del gobernante y además,
por qué no, hasta un dinerito extra que nada mal les caería en estos momentos
de tanta necesidad monetaria navideña.
Hubo algunos diputados
que de plano solicitaron la remoción inmediata de González. Tal vez no estén
enterados de que existen cuando menos medio centenar de denuncias en contra de
Ediles de todos los partidos ante la PGJ que promovió LMG, tal vez no recuerden
que fue la propia PGJ la que solicitó más información de esas denuncias porque
se les habían extraviado las averiguaciones y que la anterior coordinación
legislativa, en manos de Juan Ángel Flores Bustamante, solicitó alrededor de
siete mil copias fotostáticas de esas auditorías y sus denuncias, copias que
siguen durmiendo el sueño de los justos en alguna oficina del Palacio Legislativo
de la Calle de Matamoros 10 en Cuernavaca.
La realidad es que
Graco Ramírez quiere a Luis Manuel González fuera de la titularidad de la ASF.
Le urge al gobernador tener a un auditor “A
modo”, si, uno que no le esculque mucho a los gastos y que deje de husmear
dentro de las licitaciones de obra pública, que no se meta mucho en el gasto de
casi seis millones de pesos al ex juez Baltasar Garzón, que deje en paz el
millonario gasto de la presentación de Placido Domingo en Tequesquitengo y que
no indague mucho si hubo o no utilidades y si estás fueron entregadas la
beneficencia pública como se prometió.
Que no observe la
compra de camionetas blindadas al por mayor, los suntuarios gastos de oficina,
que los múltiples viajes del gobernador no sean removidos, que no se pregunte
el por qué se contrata casi siempre a la misma compañía que pone los escenarios
en las presentaciones públicas de cantantes. Ojalá y que el “Auditor a Modo” no le rasqué a los
pagos que autoriza la Secretaría de Información y se sepa poco o nada de que se
pagan casi siete millones de pesos mensuales a las empresas de la Familia
Bracamontes.
En fin, al gobierno del
Estado le urge que se quite al Auditor Incomodo, no vaya siendo que se sepa
finalmente que el hijastro del gobernador si podría estar cobrando el ya famoso
veinte por ciento en cada venta mayor de un millón de pesos que se le hace al
Gobierno de la Nueva Visión.
JABONAZO
Más de treinta
osamentas fueron encontradas en fosas clandestinas en el municipio de Emiliano
Zapata, lo que todo mundo sabía se confirmó. El gobernador afirma que son de
antes de que iniciara su gobierno y trata de salvar la bronca. ¿Será que el
delito de homicidio fenece con el cambio de sexenio?
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